CONRAD VEIDT

«Una gran estrella es una especie de aristócrata por méritos propios. Recuerdo, por poner un ejemplo, a la estrella germana Conrad Veidt, ciertamente uno de los grandes nombres del teatro alemán, quien más tarde desarrollaría una estimable carrera en Hollywood y moriría allí. Fue durante el rodaje en Inglaterra de la adaptación de la novela de Lion Feuchswanger  "El Judío Süss" en 1934 (no confundir con la versión alemana de 1940). Todo estaba preparado para la escena de la ejecución, la más elaborada de todas, para la que habían levantado un escenario que representaba la plaza de un pueblo. Un gran número de extras esperaba en el plató, y una desagradable jaula o algo parecido colgaba junto a la horca en la que iban a estrangular a Conrad Veidt. El propio Veidt, caracterizado por completo en su papel de Süss y listo para hacer su gran entrada, se encontraba en un carro con las manos esposadas, rodeado de guardias, a punto de ser conducido dentro del set en donde las cámaras mostrarían cómo era bajado del carro y llevado a rastras hasta el lugar de la ejecución. En ese momento alguien gritó que algo no iba bien con las cámaras –lo que pasa constantemente durante los rodajes–, y que descansábamos por diez minutos.

Aquí fue donde tuve la oportunidad de ver a Conrad Viedt como el gran actor que era. Se sentó en el carro. Una escenógrafa, una de las chicas del estudio, se acercó a él y le ofreció un caramelo. Ante algo así un actor menor hubiese hecho una de estas dos cosas –quiero decir una estrella menor. Veidt era de hecho un gran actor, pero aquí me estoy refiriendo a esa cualidad que hace brillar a alguien como un astro. Una estrella menor se hubiera contrariado por la estúpida chica que interfería en el clímax, porque él trataba de mantener el clímax de un condenado a muerte a punto de ser ejecutado, y que le dieran un caramelo estaba fuera de lugar; o en el otro caso, alguien ansioso por mostrar que también era una persona de carne y hueso como los demás hubiese bromeado con el asunto, quitándose esa máscara del Judío Süss, el gran aristócrata que había sido descubierto como un hijo de Sión y condenado a la horca debido a los prejuicios de su época. Pero, ¿qué es lo que hizo realmente Veidt? Bajó la mirada. Vio a la muchacha. Y no la reconoció como una pequeña escenógrafa del siglo XX; la vio como la única muchacha en todo el pueblo que se compadecía de él mientras era conducido al patíbulo. Los ojos se le llenaron de lágrimas. Sin poder articular una palabra, se quedó en silencio, movió un poco la cabeza en señal de asentimiento y gratitud, con sus manos encadenadas cogió el caramelo y se lo llevó a la boca a pesar de que apenas podía metérselo en ella, y lleno de tristeza levantó de nuevo la cabeza y se dispuso a esperar el momento en que el set se reanudara. Fue simplemente magnífico, y nos dio a todos una lección de lo que significa tener estilo».

Christopher Isherwood - Isherwood on Writing,  University of Minnesota Press, 2007

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Por azar descubrí a Veidt buscando imágenes en Internet. Luego encontré la película El hombre que ríe.
Me gusta pensar que su papel de nazi en Casablanca hubiera sido una venganza personal en el plano de la interpretación (su mujer era judía, lograron escapar de Alemania)Te mando un retrato que me gusta mucho, es el de un actor exquisito que fuma sin humos:

http://s3.amazonaws.com/data.tumblr.com/tumblr_lhxwgnj2v31qei4kso1_1280.jpg?AWSAccessKeyId=AKIAJ6IHWSU3BX3X7X3Q&Expires=1304235125&Signature=Romv5TIwA%2B52pDw%2BakVdq3aR4mo%3D

Gracias por el texto de Isherwood. Gracias por la entrada, sigue así.Saludos. :)

SUPPORT ANIMAL LIBERATION FRONT dijo...

Exquisito es la palabra. La relación de Veidt con los nazis tiene que estar llena de historias, por lo visto aguantó todo lo que pudo (hasta el 33) sin ceder un ápice en su oposición, y sólo se marchó del país cuando se enteró de que directamente iban a matarlo. Alemania debe estar muy orgullosa de este hombre. Saludos!

El Abuelito dijo...

Veidt, icono del fantástico europeo... una anécdota que desconocía, y que me parece conmovedora y mujy ilustrativa del talento inmenso del actor...

SUPPORT ANIMAL LIBERATION FRONT dijo...

Un monstruo; adentrarse en su filmografía es toda una experiencia, por suerte hay material para parar un tren. Saludos Abuelito!

Isabel Carrasco dijo...

Gracias por la nota, un ejemplo más de lo que era Conrad Veidt, para mí, uno de los más grandes actores del siglo XX. Gracias.

Publicar un comentario